Durante este fin de de semana, 24 y 25 de julio, se ha llevado a cabo el IX Pleno del Consejo Central de los CJC. Un pleno en el que se ha realizado la evaluación del curso anterior y la planificación de objetivos y tareas políticas para el curso 2021-2022.
Afrontamos un periodo que estará marcado por la crisis capitalista y por las formas en las que el Gobierno socialdemócrata ejecutará medidas para salir de ella. Medidas que redundarán en un aumento de la explotación y el empobrecimiento del conjunto de la clase y, particularmente, de su juventud. De una juventud que ha crecido entre dos crisis y que debe decir basta.
Es por ello que desde la Juventud Comunista somos conscientes de que iniciamos un curso que exigirá de la máxima tensión militante, pero también que lo afrontamos en mejores condiciones gracias al crecimiento y a la mejora del funcionamiento de nuestra organización.
Un curso que exigirá de audacia y valentía para ser capaces de potenciar una respuesta a la crisis que parta del señalamiento del modo de producción capitalista, que busque transformar radicalmente la realidad y se oriente a la generación de todo un tejido organizado desde los centros de trabajo a las universidades, de las universidades a los barrios, de los barrios a los institutos. Una respuesta que debe comenzar ya, sin esperar, volviendo a pisar las calles, plantando cara a cada medida.
Porque la revolución no es una entelequia situada en un futuro siempre lejano, es algo que se disputa aquí y ahora, es algo que se construye cada día y en cada espacio de vida y trabajo
¡Elige lo necesario! ¡Construye la alternativa revolucionaria! ¡Únete a la juventud comunista!
